PUBLICADO EN LA VERDAD EL MARTES 22 DE JUNIO DE 2017
1977 fue el año en el que todo era posible: que estallara el
punk en Londres, que se estrenara "La Guerra de las Galaxias", que
Iggy Pop lanzara el "Lust for life" o que Enrique y Ana debutaran en
televisión, que no todo iba a ser bueno. Pero, sobre todo, 1977 fue el año en
el que aprendimos a votar. Y los españoles, que habíamos sido durante cuatro
décadas de plato único, nos encontramos por vez primera con una sopa de letras
en el menú: UCD, AP, PCE, PSOE y un montón de extrañas siglas que englobaban desde
la ANEPA-CP (Asociación Nacional para
el Estudio de Problemas Actuales) hasta el AEICYU (Agrupación Electoral
Independiente del Campo y la Ciudad). Raro fue que no se presentara Pitita
Ridruejo por el LACA, la Liga de Amantes del Cardado Atómico.
España, en el 77, era cándida e inexperta. Y hipster: la
barba se hizo tan popular que hasta el rey se la dejó crecer (Juan Carlos de
Barbón, dice Peñafiel que le llamaban). También cuenta Peñafiel que aquel año
fue la primera vez que se vendió una exclusiva sin mediación de agencia: Jimmy
Giménez-Arnau se presentó en la redacción de ¡HOLA! y colocó su boda con Merry
Martínez-Bordiú, la nieta de Franco, por un millón de pesetas. Amárrame esos
pavos. Y amárramelos otra vez, porque ese mismo año también se casaron Concha
Velasco y Paco Marsó, y el Duque de Feria con Naty Abascal. Total, para luego
acabar como acabaron.
Mientras, Bárbara Rey lo mismo se ponía una camiseta con la
leyenda "Vote Centro" que se la quitaba para rodar "Me siento
extraña", y Pablo Abraira se convertía en paloma por querer ser gavilán, y
Miguel Bosé desplegaba su encanto ambiguo ante la mirada estupefacta de su
padre, y Liza Minnelli nos deseaba Feliz Navidad con una copa de Freixenet en
la mano. Hoy, en cambio, a la Minnelli no le dejan ni oler el champán. Pero aquí
estamos, Liza y nosotros. Ella ha pasado por cuatro matrimonios, distintos
centros de rehabilitación y varias operaciones; nosotros por un intento de golpe
de estado, una abdicación, tres mociones de censura, doce elecciones generales,
la muerte de Chanquete, el Aserejé y varios fracasos en Eurovisión. Y aquí seguimos,
en la ruta 77, la que iniciamos un 15 de junio de hace ahora cuarenta años y
cinco días. Y que no se acabe la carretera.